martes, noviembre 18

Oliver Aton

Esta noche después de cerrar, vamos con los de la librería a jugar al fútbol. No: un fulbito, así le llaman. Cuando me lo propusieron hace dos semanas pensé que mi Ni en pedo había sido lo suficientemente enfático como para ahuyentar cualquier otro pedido. Wrong. Insistieron, insistieron. Accedí con la condición de que la competición no sucumbiera ante las apuestas y estuviera lo menos expuesta posible a la mirada ajena.

Mis (inexistentes) habilidades en la cancha fueron por última vez exhibidas en la escuela primaria. Yo era algo a lo que aún llaman defensor. En ese tiempo, cuando para tener clases de educación física íbamos hasta el Club Ciudad, me enteré de que existía una calle llamada Crisólogo Larralde y tres clases de jugadores: los que les gustaba jugar y jugaban bien; los que les gustaba jugar y jugaban más o menos; y los que no sabíamos qué carajo era un corner y por qué cuando la pelota alcanzaba tal lugar, todos gritaban CORNER como si se tratara de un incendio. Jugábamos mal, por supuesto. O no jugábamos, mejor. Manteníamos una certeza tácita según la cual nuestros logros más acabados en la cancha podían ser alejar a la pelota de nuestro arco y poner los buzos para formarlo.

Le tuve y le sigo teniendo poca paciencia al fútbol. La última vez que intenté seguirle el hilo a un partido terminé divagando sobre los motivos por los que la indumentaria del fútbol habría tenido un desarrollo tan pobre. Por otro lado, los jugadores pierden más puntos si los comparamos con los rugbiers, sementales salvajes de origen oligárquico.

Sin embargo, como fieles repetidores de una neurosis físico-educativa, hoy volveremos a poner a prueba a la Historia. Y si las Sagradas Escrituras no se equivocaron, vamos a confirmar que:

Y Fernando dijo que se hiciera el corner. Y el corner se hizo.
Génesis II-3

4 notas al pie:

malén dijo...

jajajajaja
te amo

Anónimo dijo...

jajajaja! esta muy bueno.
Además compartimos o compartíamos club.
TE felicito.

Si queres pasate por nuestro blog:
www.vetelopez.blogspot.com

Gracias!

Pablo E. Balán dijo...

¡Va mejorando la prosa, eh!
Te lo dice quien hizo famosa la frase "¿Sigue de moda el fútbol?" Invento fascista, si los hay.
A ver cuándo venís a la UdeSA a ver rugbiers.

Vanina Yanel dijo...

me perdí verte corriendo en pantalones cortos.
eso no tiene precio.



besos i love u